Suecia lanza la caza de lobo más grande en los tiempos modernos
El gobierno sueco ha revelado planes para reducir la población actual de alrededor de 400 lobos hasta la mitad, dando un ejemplo preocupante que muchos ambientalistas y activistas temen que sigan otros Estados miembros de la UE.
Según el plan gubernamental, a los cazadores podrán matar a 75 de los 460 lobos que actualmente deambulan a Suecia. Vemos que la población de lobo está creciendo cada año y con este sacrificio, queremos asegurarnos de que podamos llegar al objetivo establecido por el Parlamento, la ministra de Asuntos Rurales suecos, Anna-Caren Sätherberg, dijo a SVT, y agregó: podemos ver que el nivel de conflicto ha aumentado y que ha caído el nivel de aceptación.
Según Sätherberg, el gobierno sueco ha pedido a la Agencia Estatal de Protección Ambiental que reconsidere el número de lobos disponibles para el sacrificio. La agencia dijo anteriormente que el número de lobo debería permanecer alrededor de 300 para evitar la endogamia. Sin embargo, el parlamento sueco está a favor de reducir la población de lobo a 170, lo más bajo que puede ir sin romper las reglas de la directiva de especies y hábitats de la UE.
Si bien muchos han acogido la noticia, argumentando que la población de lobo de Suecia está fuera de control, otros han afirmado que es relativamente bajo en comparación con países como Italia, que actualmente alberga a más de 3.000 lobos salvajes. A muchos ambientalistas les preocupa que matar a más de la mitad de la población de lobo de Suecia devastará en lugar de curar el ecosistema del país.
Los lobos como los principales depredadores en la cadena alimentaria son un requisito previo para la biodiversidad, dijo Marie Stegatd del grupo anti-caza Jaktkritikerna El guardián. Matar una cuarta parte de la población a través de la caza tiene consecuencias negativas para los animales y la naturaleza. Es desastroso para todo el ecosistema. La existencia de lobos contribuye a una vida más rica en animales y vegetales. La supervivencia humana depende de ecosistemas saludables. Benny Gäfwert, un experto en depredadores en la WWF, también ha afirmado que la cifra del Parlamento de 170 no se basa en ningún hecho científico.
La cifra coloca a la población de lobo de Escandinavia con un riesgo aún mayor. El lobo escandinavo figura como una especie en peligro de extinción, pero en Noruega, donde está en peligro crítico, las políticas de gestión mundial estipulan que solo cuatro a seis cachorros pueden nacer cada año, lo que hace que Noruega sea el único país del mundo en establecer un límite en una especie en peligro crítico.





































